Chaleco antibalas táctico sobre pañuelo militar listo para su limpieza en verano

Cómo limpiar el chaleco antibalas en verano sin cargártelo

El verano tiene muchas cosas buenas: madrugar es más fácil, todo huele a playa y los cafés fresquitos son una bomba. Pero como en todo, una de cal y otra de arena: el calor hace que tu equipo sufra, que el chaleco huela a perro mojado... y probablemente a algo peor.

Por eso, te traemos una guía sencilla, segura y económica para mantener tu chaleco antibalas sin que salten los fraggle rock cada vez que abres la taquilla.

⚠️ Aviso importante

Siempre que limpies el chaleco, separa el panel balístico de la funda.

Nunca mojes ni sumerjas el panel balístico en agua, podrías cargarte su composición y hacerlo inservible. Tampoco lo dobles ni le pongas peso encima.

Paso 1: Retirar el panel balístico

Nada de hacerte el loco. Léete la etiqueta del fabricante y sigue las instrucciones para quitar el panel sin reventar cremalleras o velcros. Mejor prevenir que lamentar.

Repetimos como con los Gremlins: NO mojes el panel, solo la funda.

Paso 2: Limpiar la funda

Tienes dos opciones:

  • Lavadora (solo si el fabricante lo permite): programa delicado, sin suavizante, sin centrifugado.

  • Modo furriel (nuestra favorita): barreño con agua, jabón suave y a frotar con cepillo viejo o de cerdas blandas.

Secado: al aire, sin sol directo ni secadora, y nunca sobre el radiador.

Paso 3: Limpiar el panel balístico

Sí, también se limpia. Pero cuidado:

  • Usa un paño húmedo o toallitas sin alcohol (tipo bebé o papel de combate).

  • Nada de sumergir, echar lejía o meterlo en la lavadora.

Secado: igual que la funda, sin prisa y al aire libre.

Paso 4: Secado completo

No tengas prisa. Si montas el chaleco húmedo, el olor a jineta podrida te acompañará por los siglos de los siglos. Y peor aún: tu equipo puede degradarse.

DUTYCONSEJO: La limpieza del día a día

Si curras por turnos o usas el chaleco de lunes a viernes, sabes que no puedes esperar 24h para que se seque. Te toca una solución rápida:

  • Sprays desinfectantes textiles: los encuentras en cualquier supermercado, marcas blancas incluidas. No mojan mucho, no son agresivos y matan las bacterias del mal olor.

Funciona en verano, en invierno, y tu compañero te lo agradecerá.

Conclusión DFC:

El chaleco te salva la vida. Lo mínimo que puedes hacer es no dejarlo como una cloaca. Siguiendo estos pasos, te mantendrá protegido, operativo y sin espantar al personal.


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